Frankenstein, un peliculón.

Hacía tiempo que no veía una película con argumento. Un drama de acción que deja a toda la familia contenta. Debo ser sincero; durante la semana, escuchando "Radio Suquía", pude oír la crítica realizada por 'Flecha Lastrico', el periodista cordobés, y con este viernes de lluvia me acordé y la busqué en Netflix.

He leído la novela de Frankenstein cuando tenía 10 años, he visto películas realizadas en base a la novela y otras que no, dibujos animados, cómics y también series. Este largometraje, escrito por Guillermo del Toro, "está basado en la novela homónima de Mary Shelley de 1818" (Wikipedia). Es una excelente mezcla de todas ellas y a lo mejor un nuevo comienzo de una nueva.

Jacob Elordi, representa a la "creación" de Victor, Oscar Isaac, el doctor Frankenstein, que le dio una vida "más humanizada" a la bestia, que se enamora de Elizabeth, Mia Goth. El monstruo, después de la muerte de Elizabeth, decide llevar a cabo una venganza muy particular contra su matador.

La película de "Guillermo del Toro" presenta una historia paralela de la representación de Dios y Caín, con un final alternativo, la ambición, testarudez de la humanidad y su trágico final en el excelente papel protagonizado por Christoph Waltz.

En fin, una excelente película que de seguro se posicionará dentro de las 10 películas más vistas de Netflix en poco tiempo, de estar recién agregada a la plataforma.

Una obra maestra de Guillermo del Toro